Por: Yuval Nemirovsky
Durante los últimos días, un video del dueño de un puesto de falafel se hizo viral en todo Israel. El video, entristecía hasta a los menos sensibles. El dueño del puesto se quiebra en llanto al entender que la ley de cuarentena le prohíbe abrir el negocio.
El, en lágrimas les explica a los reporteros que nunca pidió ayuda, que siempre trabajó para alimentar a su familia y ahora no lo puede hacer por culpa de la cuarentena.
El video fue compartido por miles de personas. Muchas de ellas culpan al estado por las políticas de cuarentena que golpearon duramente la economía y trabajo de muchas personas en Israel hasta llegar al número de casi un millón de desempleados.
El golpe más duro lo recibieron los negocios independientes, aquellos dueños de pequeños y medianos negocios, como salones de belleza, restaurantes, florerías, servicios en general.
Negocios que a su vez emplean trabajadores y mueven un pequeño capital cada mes.
Estas personas, los dueños de los negocios, pagan impuestos, pero sin embargo no reciben seguro de desempleo.
Una gran mayoría de personas le piden al estado intervenir y ayudar a la economía. ¡Lo cual debería ocurrir sin duda!
Otros, defensores del mercado libre y el capitalismo extremo, le piden al estado terminar con la cuarentena ya que argumentan que la destrucción de la economía libre va a traer la destrucción y hambre de los ciudadanos. ¡Y están en lo correcto también!
Sin embargo, la crítica hacia las políticas de cuarentena y poner en la balanza la economía sobre vidas humanas es un error del sistema.
Las políticas de cuarentena y distanciamiento social, salvan vidas. Es un hecho que no tenemos las herramientas necesarias para combatir el virus de corona directamente en el campo de los sistemas de salud, los hospitales y la ciencia. Tomará tiempo hasta que se prepare una vacuna y sepamos científicamente como combatir el virus.
Entonces la crítica debería ser hacia el sistema económico y las políticas de gobierno en una situación normal. Déjenme recalcar que las políticas extremas de cuarentena y distanciamiento social están salvando vidas en Israel y lo podemos ver también reflejado en el bajo número de muertos relativamente a otros países del mundo.
La crítica hacia el sistema económico entonces debería ser sobre las políticas de gobierno en una situación normal, por ejemplo, sin corona, sacarían al dueño del falafel de un mercado libre y competitivo en el cual podría llevar a su negocio a quebrar. En un escenario así, dudo mucho que tanta gente hubiera compartido el video y se hubiera entristecido porque tuvo que cerrar su negocio. Y eso es un verdadero problema en nuestros valores.
Si ya somos capaces de crear con nuestras mentes, instituciones, sociedades, y países que nos ayudan a vivir una “vida civilizada”, entonces estas herramientas nos deberían cuidar durante nuestras vidas. Nos deberían cuidar durante momentos de crisis y también durante días “normales”.
Es imposible seguir pensando que un sistema de capitalismo libre, sin intervención y ayuda de gobiernos a personas que pagan impuestos puede seguir siendo viable en un futuro.
Es imposible seguir pensando que un sistema de salud debe ser un mercado libre y competitivo. Un sistema de salud debe ser del nivel más alto y con profesionales de salud bien remunerados al servicio de todo ciudadano. Que no se vuelva un disparate y una subasta de servicios como lo es Estados Unidos hoy en día, país el cual está recibiendo un duro golpe de muertes por corona.
Solo puede ser viable, un país que predica un sistema de educación gratuito del más alto nivel. Profesores que hoy en día son indispensables y se tuvieron que adaptar a lo que la situación requería para que las clases puedan pasar a ser virtuales.
Solo puede ser viable un país y un sistema, que se preocupa por el otro, que sabe que hacer cuarentena cuando el gobierno le tiene cubierta la espalda, y así ocuparse de que no se contagien los vulnerables, sean de sus familias o no.
Predicar a favor de no dejar morir la economía de hoy, a favor de eliminar políticas de cuarentena, es irresponsable y es no entender la verdad del problema.
Queremos una economía vibrante, y para eso los gobiernos deben brindarnos la protección ya sea en tiempos de corona o no.
Esperemos que podamos combatir el virus y podamos volver a la “normalidad”, pero espero no nos olvidemos la lección y luchemos para cambiar estas políticas económicas que nos dejaron mal parados durante la crisis del corona.
Jazak Veematz!